Tilcara

Leyenda de la montaña de #tilcara .

Cuentan las calles de Tilcara que la montaña rajada solía caminar con el pelo suelto y las tetas al aire.

Solo unos pocos molles peinaban al viento en aquel entonces.

Una tarde el señor de ojos de hechicero clavó sus zapatos en Avenida Belgrano.

El guadal se escondió para dejarlo entrar.

Los ruidos hondos de las crecidas se silenciaron.

Y él se sumergió en un estado de extasis cuando la vió.

Por vez primera se estrelló con una figura que no aparecia sencillamente.

Una punzada en la espalda ella sintió y giró el cuerpo.

Aquellos ojos negros le desabrocharon la falda al reflejarse en los suyos, dejandole su figura al descubierto y su sonrisa desnuda.

El estampó con tanta intensidad su mirada en ella que la dejó convertida en un bloque de arcilla.

Y se esfumó con la tierra.

Sumida en su soledad, amasijada por su memoria, la muchacha de oyuelos profundos y sonrisa ancha se quedó ahí por años.

Le gritó al viento.

Le envió mensajes a la lluvia.

Permaneció en vela durante semanas esperando el retorno de aquel hombre.

De Aquellos ojos que le habían robado su aliento.

Pero todo lo que consiguió fue amontonar imágenes de semillas reventandose en raices, incontables tormentas arrasando cosechas mientras ella yacia inmóvil , atrapada en la forma de la montaña rajada.

Pese a los años, a los vendavales que se van llevando sus trozos, ella persevera.

Y transcurre las noches de los cielos esperando dar con alguna estrella que la deslumbre como lo hicieron los ojos de aquel hechicero.

Añora sentir el ardor de sus pies en contacto con el suelo rojo.

Ni las aguas del Rio Grande han recibido noticias del sujeto.

Sospechan que yace escondido en el polvo y que transó con la brisa para envolver a la montaña y asi amarrarla lo que dure el planeta.

Pero el enigma está con ella.

El sudor de la mujer que fue se huele entre sus piedras, que aún jadean con su voz etérea.

Sus rajaduras descansan sobre su torso desnudo.

Sus piernas delgadas se asoman al atravesar los sedimentos acumulados por los días.

Basta con que zambulla su mirada en las profundidades del magma y devele el misterio.✨

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